Descubre las 10 peores profesiones según Francis T. McAndrew: ¿te sorprenderán los resultados?

¿Qué puede ser más complicado, frustrante y desgastador para alguien que se entrega al trabajo diariamente? ¿Cuáles son las profesiones más difíciles y mal vistas por la sociedad? Francis T. McAndrew, investigador del Departamento de Psicología de la Knox College en Estados Unidos, quiere despejar el mito y revelar qué son las peores profesiones del mundo según la percepción de los expertos y el público en general.
En este artículo, vamos a explorar un estudio innovador que examina las percepciones de 1.341 sujetos sobre las peores profesiones del mundo, con resultados que seguro te sorprenderán. ¡Conoce qué son las 10 profesiones más mal vistas y descubre qué factores las convierten en algunas de las menos deseadas en el mercado laboral!
- El estudio de Francis T. McAndrew sobre las peores profesiones
- ¿Qué se considera como una peor profesión?
- Las 10 peores profesiones según el estudio:
- 1. Payaso
- 2. Taxidermista
- 3. Director de funeraria
- 4. Dueño de un Sex Shop
- 5. Taxista
- 6. Cura
- 7. Portero
- 8. Basurero
- 9. Guardas de seguridad
- 10. Escritor
- Análisis de los resultados
- Factores que influyen en la percepción de una profesión como peor
- Conclusión
El estudio de Francis T. McAndrew sobre las peores profesiones
Según un nuevo estudio llevado a cabo por el investigador del Departamento de Psicología de la Knox College en Estados Unidos, Francis T. McAndrew, las 10 peores profesiones del mundo no son necesariamente aquellas que se asocian con gran cantidad de trabajo o poca estabilidad laboral, sino mucho más.
Después de recopilar respuestas de 1.341 sujetos sobre las profesiones que consideran peores, McAndrew encontró que las primeras plazas en la lista no corresponden a aquellas trabajos que impliquen largas horas o poca estabilidad laboral, como por ejemplo la contabilidad o el trabajo nocturno. En su lugar, las profesiones más malvistas se concentran en trabajar con el dolor, la muerte y la suciedad.
Para McAndrew, estos trabajos que implican tratar con emocionalmente lastimonas situaciones, como la pérdida de seres queridos o la responsabilidad de enterrar los restos mortales de otros, pueden generar un estrés particular que no se encuentra en otros trabajos.
¿Qué se considera como una peor profesión?
Un estudio realizado por Francis T. McAndrew, investigador del Departamento de Psicología de la Knox College en Estados Unidos, examinó las percepciones de 1.341 sujetos sobre las peores profesiones del mundo. Los resultados mostraron que las siguientes son las 10 peores profesiones:
La falta de estabilidad laboral y el exceso de trabajo pueden ser algunos de los factores que contribuyen a la percepción de que ciertas profesiones son peores que otras. Además, la poca consideración hacia los trabajadores y la precariedad laboral también pueden jugar un papel en este sentido.
Entre las profesiones estudiadas, algunas se destacaron por ser particularmente desagradables o estresantes para sus empleados.
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Un estudio realizado por Francis T. McAndrew, investigador del Departamento de Psicología de la Knox College en Estados Unidos, examinó las percepciones de 1.341 sujetos sobre las peores profesiones del mundo.
Unos de los trabajos que encabezan la lista son el payaso y el taxidermista. Puede parecer sorprendente ver a un payaso entre las peores profesiones, pero según el estudio, esta ocupación es considerada mala debido a su falta de estabilidad laboral y al exceso de trabajo. Además, el estrés y el burnout pueden ser consecuencia de esta profesión, ya que se requireción estar siempre "enmascarado" para mantener el personaje.
Otro trabajos en la lista es el director de funeraria, ocupación considerada mala debido a su naturaleza triste y requerimientos emocionales altísimos. El dueño de un Sex Shop también se incluyó entre las peores profesiones, probablemente por las sospechas y miradas burlonas que puede recibir de la sociedad.
1. Payaso

No es una misión fácil hacer reír a la gente todos los días, y para muchos, el papel de un payaso es el peor trabajo imaginable. Imagina tener que desarrollar personalidad propia para que las personas se rían de ti, sin importar lo que acontezca en tu vida personal. El estrés y la presión pueden ser extremos, ya que debes mantener una apariencia alegre siempre, incluso cuando te sientas cansado o desanimado. Además, los payasos suelen vivir con un estipendio muy bajo, lo que puede hacer que sea difícil mantener un nivel de vida decente.
Aunque algunos personas disfrutan del tipo de interacción social y la creatividad que proporciona ser un payaso, para muchos otros es un trabajo tedioso y desesperanzador. La expectación constante de realizar una función determinada para que las personas se rían puede causar estrés agotador. Si quieres ser un payaso exitoso, debes ser capaz de llevar la mascara en momentos buenos y malos, lo que puede ser verdaderamente cansado.
2. Taxidermista
Taxidermia es el arte de preservar y montar animales para exhibir su apariencia exterior en un entorno estético. Sin embargo, según Francis T. McAndrew, este trabajo no solo implica una gran cantidad de tiempo y dedicación, sino que también requiere habilidades precisas y la capacidad para maniobrar con ciertos materiales y substancias químicas peligrosas. Además, muchos taxidermistas deben trabajar en entornos incómodos, como cajas de paja o cuartos fríos y húmedos, lo que puede llevar a sentimentos de abrumamiento y desesperación.
Para un estadounidense promedio, la idea de que alguien se dedique a preservar la piel de animales para uso ornamental puede ser difícil de comprender. Sin embargo, muchos taxidermistas son apasionados defensores del medio ambiente y de la conservación animal, y su trabajo es una forma de ensayarla importancia de estas criaturas durante la vida silvestre. Aun así, el estigma que rodea esta profesión puede llevar a muchos a evitar revelar su profesión o a sentirse incómodos al hablar sobre su trabajo, lo que no ayuda a mejorar la mala reputación que se le asigna.
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Ser director de funeraria es un trabajo que requiere una gran cantidad de habilidades y competencias, pero no son suficientes para compensar la carga emocional y física que estos profesionales enfrentan a diario. El director de funeraria debe manejar casos sensibles y complicados, como la preparación del cuerpo de un defunto para el entierro o la toma de decisiones sobre los arreglos fúnebres. Además, deben manejar las conversaciones con amigos y familiares del difunto, lo que puede ser un proceso íntimo y doloroso.
La falta de estabilidad laboral es otro desafío para este tipo de trabajos. Los directores de funeraria suelen trabajar en pequeñas empresas o en minorías, lo que les hace más vulnerables a cambios bruscos en la economía o la industria. También pueden experimentar una gran variación de emociones negativas, desde la tristeza y el duelo hasta la ansiedad y la frustración. Por todas estas razones, ser director de funeraria figura entre las 10 peores profesiones según Francis T. McAndrew.
4. Dueño de un Sex Shop
Ser el dueño de un sex shop no es una profesión fácil, ni siquiera para aquellos que aman el sexo y la pasión. La responsabilidad de gestionar un establecimiento que vende productos eróticos puede ser muy estresante. Los clientes pueden ser curiosos o incluso críticos, lo que hace que sea difícil mantener una distancia profesional. Además, los dueños de sex shops suelen enfrentarse a desafíos legales y morales, ya que se les considera parte de la industria del entretenimiento para adultos.
Además, la mayoría de la sociedad puede ver como tabú o incluso inmoral la venta de productos de sexo, lo que puede hacer que los dueños de sex shops sientan que deben defender constantemente su profesión ante amigos y familiares. Esto puede generar un sentimiento de aislamiento y falta de comprensión por parte de la sociedad, lo que puede afectar negativamente a la salud mental y emocional del individuo. Sin embargo, para aquellos que se ganan la vida vendiendo productos de sexo, es necesario encontrar formas de manejarse con este estrés y preservar su bienestar personal.
5. Taxista

Los taxistas tienen una profesión difícil, rodeados por la gente en constante movimiento y presionados para llegar a tiempo a sus destinos. Según un estudio de la Asociación Estadounidense de Psicología Laboral, los taxistas están expuestos a niveles elevados de estrés y ansiedad debido a la falta de control sobre su rutina diaria y el constante cambio de itinerario. Además, la mayor parte de su jornada se pasa en solitario, lo que puede contribuir al sentimiento de aislamiento y soledad. Es fácil entender por qué muchos consideran esta profesión como una de las peores del mundo.
Quizás lo más difícil para un taxista sea manejar el tráfico y la congestión en ciudades grandes, donde los conductores pueden perder horas esperando a que se desbloqueen las calles o sorteando pelotillas de vehículos. La presión para mantenerse enfocado y atento al camino es constante, lo que puede lleva a un estrés crónico y un cansancio físico y mental.
6. Cura
La profesión del cura puede parecer noble y comprometida, pero para muchos, es considerada como una de las peores profesiones por varios motivos. El estrés y el burnout son comunes entre los ministros religiosos, quienes deben enfrentar la responsabilidad de guiar y consolar a sus feligreses en momentos de duelo o tribulación, lo que puede llevar a una carga emocional significativa. Además, muchos curas deben vivir según principios éticos estrictos y abstenerse de ciertas cosas, como el matrimonio o la posesión de propiedades personales, lo que puede llevar a sentimientos de restricción y frustración.
Además, los curas pueden enfrentar la presión de mantener las creencias religiosas de sus feligreses en un mundo cada vez más secularizado, lo que puede generar una sensación de ineficacia o fracaso. A menudo se les exige ser expertos en asuntos teológicos y morales, y deben tener la habilidad de consolar y orientar a los demás sin importar el momento ni el lugar. Todo esto puede llevar a un sentimiento de vaciedad emocional y desgaste físico si no se maneja adecuadamente.
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El trabajo de portero puede parecer sencillo en teoría, pero en la práctica es una labor exigente y poco reconocida. Los porteros deben estar constantemente atentos a las actividades que se desarrollan en el lugar donde trabajan, lo que puede ser estresante y demandar mucha concentración. Además, suelen trabajar solo o con un equipo pequeño, lo que puede generar sentimiento de soledad y abatimiento. A menudo, también deben enfrentar situaciones desagradables, como incidentes violentos o conflictos entre personas, lo que puede afectar negativamente su estado emocional. Es poco probable que los porteros reciban reconocimiento o gratificaciones por sus esfuerzos, lo que puede contribuir a la percepción de esta profesión como una de las peores del mundo.
8. Basurero
La profesión de basurero no gusta a nadie, y es fácil entender por qué. Trabajadores que se ven obligados a enfrentar el desagradable resultado del consumo humano diario - residuos llenos de restos orgánicos y materiales peligrosos - suelen tener una vida laboral intensa y agotadora. La suciedad, el olor y el contacto con material contaminado pueden ser un golpe duro para la moral y la salud mental. A pesar de todo lo necesario que son, los basureros a menudo se sienten invisibles y descompensados por su laboratorio ingrata.
La percepción pública sobre esta profesión puede ser aún más negativa, ya que los residentes pueden verlos como unos eliminadores inefectivos o alguien que simplemente no ve la importancia de su trabajo. Sin embargo, sin los basureros y los servicios de saneamiento público, las ciudades se volverían inmanejables y hacinadas con residuos peligrosos. Es importante recordar que, como cualquier otra profesión, este trabajo requiere habilidades, dedicación y resistencia para enfrentar la dura realidad diaria.
9. Guardas de seguridad
Los guardias de seguridad ocupan el noveno lugar en la lista de peores profesiones del mundo, según la percepción de los participantes en el estudio. A menudo, estos trabajadores se ven obligados a trabajar largas horas sin descanso ni compensación adecuada, lo que puede llevar a un estrés crónico y un sensación de burnout. Además, muchos guardias de seguridad enfrentan situaciones desagradables como la violencia verbal o física, lo que puede afectar negativamente su capacidad para interactuar con los demás y disfrutar de sus vidas fuera del trabajo.
Además, la falta de estabilidad laboral es común en este campo. Los guardias de seguridad pueden perder su empleo tan pronto como lo ganen, ya sea debido a una reducción de personal o una decisión financiera no justificada. Esto puede generar una gran inestabilidad emocional y económica en el trabajo y en la vida personal. No es sorprendente que los guardias de seguridad se sientan desmoralizados y sin esperanza, lo que puede conllevar efectos negativos en su bienestar mental y físico.
10. Escritor

En una carrera que supone creatividad y dedicación, es sorprendente ver cómo la escritura puede ser vista como una de las peores profesiones del mundo. Sin embargo, según el estudio de Francis T. McAndrew, los escritores ocupan el décimo lugar en la lista de profesiones menos deseadas. La falta de estabilidad laboral y la necesidad de constantemente producir contenido pueden llevar a los escritores a un estado de burnout y estrés crónico. Además, la dependencia del apoyo financiero de las editoriales o los sponsors puede generar una sensación de precariedad laboral. Para muchos escritores, la frustración de no obtener el reconocimiento y el compromiso que se merecen pueden ser otro impedimento para su trabajo.
Análisis de los resultados

Los resultados del estudio revelan que la percepción sobre las peores profesiones es influenciada por factores como la falta de estabilidad laboral, el exceso de trabajo y la poca consideración hacia los trabajadores. En efecto, varias de las profesiones clasificadas como las peores compartieron características similares, tales como la posibilidad de tener un horario impredecible o trabajar en condiciones inseguras.
Por ejemplo, entre las profesiones que se encuentran en el extremo inferior de la lista, estamos encontrando a aquellos cuyas condiciones laborales son especialmente desafiantes. Payasos, por ejemplo, deben ser capaces de mantener una sonrisa constante, lo que puede ser agotador, mientras que los basureros y los guardas de seguridad pueden trabajar en condiciones difíciles y peligrosas. De hecho, el estrés y el burnout pueden estar relacionados con estas profesiones, lo que puede afectar negativamente la calidad de vida de las personas que las desempeñan.
Los resultados también sugieren que la falta de respeto hacia los trabajadores es un factor importante en la percepción sobre las peores profesiones. En este sentido, la directora de funeraria y el dueño de un sex shop, ambas profesiones que involucran temas personales y delicados, pueden generar una sensación de inmundicia o falta de consideración hacia los trabajadores.
Factores que influyen en la percepción de una profesión como peor
Entre los factores que influencian en la percepción de una profesión como peor, se encuentran la falta de estabilidad laboral y el exceso de trabajo. Por ejemplo, los taxistas deben trabajar largas horas y su jornada laboral puede ser inestable, lo que les puede llevar a experimentar estrés y burnout. De similar manera, los basureros pueden enfrentarse a condiciones ambientales desfavorables y peligrosos materiales para elimiar.
La poca consideración hacia los trabajadores y la precariedad laboral también pueden influir en la percepción de una profesión como peor. Esto se aplica, por ejemplo, a los porteros y las puertas guardas que pueden tener trabajos con horarios irregulares y desigual pago. En última instancia, la falta de reconocimiento y respeto hacia su trabajo puede llevar a una percepción negativa sobre su profesión como un todo.
Conclusión
Es importante destacar que la evaluación de las peores profesiones puede variar según la cultural y el contexto en el que se vive. Sin embargo, el estudio realizado por Francis T. McAndrew sugiere que hay algunos trabajos que compartan características comunes que los convierten en menos atractivos para muchos personas.
Aunque no es sorprendente que la falta de estabilidad laboral, el exceso de trabajo y la baja consideración hacia los trabajadores sean algunos de los factores que influyen en la percepción de estas profesiones como peores, lo que sí es interesante es que muchos de estos oficios son fundamentales para el funcionamiento social y económico de nuestras sociedades.
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